Mamá.

Estaba revolviendo mis cosas (las cartas) y encontré esta tarjeta.
Que puedo decir.
Si dijera que todos los días de mi vida te extraño, estaría mintiendo.
Y si, quizás pensarán: que mina insensible.
Pero asi me enseñaste, a ser quien soy, no quien los demás quieren que sea.
Y así soy, solitaria. Muchas veces me he encontrado con un vacío (amigas que se van de viaje, pérdidas, amigas que ya no son mis amigas), y en vez de extrañar a esa persona, he seguido mi vida como todos los dias.
Eso también me lo enseñaste vos, a ser independiente, a seguir adelante.
Además, se que no gano nada si me tiro a llorar como una desquiciada, y seguramente si vos estuvieras y me vieras en ese estado me dirías que no vale la pena.
Eso no quiere decir que a veces no me atrapen los recuerdos, mas bien que si. Pero solo me afectan por el momento, no paso días enteros y seguidos lloriqueando por ahí.
Eso también fue obra tuya: me enseñaste a ser fuerte.
Quizás no hayas sido la mejor madre del universo, pero eras mi madre y eso era suficiente para mi.
En tan poco tiempo que estuvimos juntas, me enseñaste más cosas de las que jamás podré saber, de esas que si no las aprendés de chico ya no se aprenden más.
Aunque eso si: una de las pocas cosas que siempre quisiste inculcarme y nunca lograste fue el ser organizada, organizada para llevar una vida más tranquila, para no olvidar estas cosas (Porque incluso había llegado a olvidar esta fecha.).
A pesar de los anuncios, propagandas y demás, fue necesario qe me recordaran que el domingo fue el día de la madre. Solo se me pasó.
Igual no es que haga falta dar explicaciones, Y ni siquiera se porqué las doy. Quizás para estar en paz conmigo misma, que se yo.
En fin, Feliz día Mamá, y lamento haberlo olvidado, olvidarte.